La proyección internacional de la psicología tomista
Desde la Pontificia Universidad Católica Santa María de los Buenos Aires
Zelmira Seligmann
Introducción: En las cátedras de Teología I y Teología II de la Pontificia Universidad Católica “Santa María de los Buenos Aires”, a cargo del Pbro. Dr. Ignacio Andereggen desde 1990 hasta 2000, dictada en las carreras de Psicología, Psicopedagogía y Ciencias de la Educación, se planteaba ̶ con una visión integradora ̶ la importancia del estudio de la Psicología bajo la guía de la Teología, a fin de conocer la verdadera naturaleza humana y el recto ordenamiento del hombre hacia su fin último, la bienaventuranza, único orden que, según Santo Tomás, puede regir los comportamientos humanos sanos y organizar toda la personalidad. Porque, como nos dice el Concilio Vaticano II en su Constitución Gaudium et spes n° 22, “El misterio del hombre sólo se esclarece en el misterio del Verbo Encarnado”.
En esta cátedra se estudiaban autores como San Agustín, San Buenaventura, San Juan de la Cruz, San Francisco de Sales, psiquiatras contemporáneos con buenas intuiciones como Alfred Adler y Rudolf Allers, etc. pero especialmente la sistematización hecha por Santo Tomás de Aquino en la Suma de Teología. No se pretendía plantear una nueva teoría o corriente de Psicología ̶ una más entre las innumerables que existen ̶ sino que se trataba de mostrar la realidad del hombre imago Dei y su verdadera psicología, la vida psíquica en su totalidad: con el dinamismo de la gracia, o sea la vida anímica que se unifica, despliega y perfecciona en sus facultades o el movimiento desviado de su fin (que es propio del pecado) donde se vive según la inercia de los vicios y del racionalismo.
 
                        